El marketing en Google solía sentirse como pilotar un avión con instrumentos visibles.
Sabías qué palanca mover, qué campaña tocar y cuándo subir o bajar la inversión.
Hoy, ese tablero se transformó en una cabina sin botones.
La IA no solo asiste: decide.
Y con esa transición, el control dejó de ser operativo para volverse estratégico.
Google no está eliminando tácticas: está reescribiendo las reglas del juego.
Y el nuevo informe de Search Engine Land lo deja claro:
Cinco hábitos clásicos de gestión en Google Ads ya no generan ventaja.
En algunos casos, incluso la frenan.
Acá te compartimos la lectura práctica de lo que cambia y, sobre todo,
cómo preparar a tu equipo para la nueva lógica del crecimiento automatizado.
1. Phrase Match ya no es tu mejor amigo
Hasta hace poco era el punto medio entre precisión y volumen.
Hoy, con Smart Bidding y Broad Match más inteligentes, las coincidencias de frase se volvieron un cuello de botella.
Los modelos de Google aprenden a partir de intención, no de coincidencia textual.
Y la frase exacta ya no alcanza para capturar esa intención.
→ Qué hacer:
Dejá Phrase solo para control limitado o queries de alto valor.
Combinalo con Broad Match + negativas estratégicas y una revisión semanal de términos.
Tu ventaja no está en el filtro: está en la interpretación.
2. Performance Max no es sinónimo de “mejor”
Durante 2024, PMax fue el juguete preferido de los anunciantes.
Pero la automatización total tiene un costo: opacidad.
Search Engine Land muestra que Standard Shopping volvió a ganar terreno en 2025, especialmente en ecommerce con márgenes claros.
Cuando querés entender qué canal genera la venta —y no solo ver un ROAS bonito—, PMax puede esconder más de lo que muestra.
→ Qué hacer:
Testeá PMax vs Standard Shopping por categoría o SKU.
Evaluá incrementalidad, no solo eficiencia.
Si tu crecimiento no se mueve sin marca, no estás escalando: estás rotando presupuesto.
3. GA4 no es tu fuente principal (y puede estar rompiendo tus pujas)
Importar conversiones desde GA4 suena lógico.
Pero el problema es temporal: GA4 reporta por fecha de evento, Ads por fecha de clic.
Eso introduce un lag de hasta 24 h que rompe el Smart Bidding.
→ Qué hacer:
Volvé a etiquetar con Google Ads tag o tracking server-side como fuente primaria.
Dejá GA4 para análisis, no para optimización.
Lo que tarda en llegar, tarda en aprender.
4. Protegé tu marca del hambre de PMax
Por defecto, PMax va a buscar lo más fácil: tus términos de marca.
El resultado: un ROAS inflado y una falsa sensación de eficiencia.
→ Qué hacer:
Separá tus campañas de Brand Search con presupuesto propio y brand exclusions en PMax.
Tu objetivo con PMax no es repetir tu nombre, sino encontrar nuevos usuarios.
Si no lo separás, terminás pagándole a Google por tráfico que ya era tuyo.
5. No pinnees tus RSAs hasta asfixiarlas
La tentación de controlar cada línea del anuncio es grande.
Pero “Ad Strength” no es un KPI: es un termómetro.
Pinnear titulares o descripciones en exceso corta el aprendizaje y limita combinaciones que podrían superar tus supuestos.
→ Qué hacer:
Dejá respirar al sistema: 8–12 titulares, 3–4 descripciones, sin obsesión por el colorcito verde.
Variedad temática > rigidez.
Tu creatividad necesita libertad para aprender.
La nueva ecuación: IA + intención + integrabilidad
Si 2024 fue el año del control, 2025 y 2026 serán los del aprendizaje compartido.
Google ya no es un tablero de control: es un sistema adaptativo.
Tu rol pasa de “operar” a enseñar.
Las marcas que lideren no serán las que más presupuesto tengan,
sino las que mejor alimenten a sus algoritmos con datos limpios, estructuras claras y objetivos coherentes.
Checklist fardo para los próximos 14 días
1. Limpieza de señales:
Revisá tus conversiones. Si tu Smart Bidding se alimenta desde GA4, migrá a etiqueta de Ads o tracking server-side.
2. Separá Marca vs No Marca:
Dejá que PMax explore. Que tu marca tenga su propio espacio.
3. Test Standard vs PMax:
Hacé un A/B simple con categorías distintas.
Medí incrementalidad, no solo ROAS.
4. Reescribí tus RSAs:
Menos control, más variedad.
Recordá: el aprendizaje necesita espacio.
5. Ajustá tu mirada:
No mires solo clics o conversiones.
Empezá a observar señales de comportamiento: intención, búsqueda nueva, usuario distinto.
Con Chrome AI Mode, ChatGPT Pulse y Claude tomando más decisiones dentro del entorno, el tráfico es un reflejo, no el resultado.
La pregunta ya no es cuántas visitas generás, sino cuántas decisiones inspirás.
La visibilidad real sucede cuando la IA entiende —y ejecuta— tu propuesta.
Google Ads se volvió una metáfora del marketing contemporáneo:
demasiada automatización sin propósito solo amplifica el ruido.
La clave no es resistirse al cambio, sino rediseñar tus tácticas para hablar el idioma del algoritmo sin perder el control del propósito.
Porque el crecimiento inteligente no es el que escala a cualquier costo,
sino el que aprende a escalar con sentido.
Muy pronto vamos a abrir oficialmente la comunidad privada de Fardo.
Un espacio para compartir frameworks, casos reales y herramientas que no están en ningún curso.
Si estás leyendo esto, ya sos parte del primer círculo.
Nos vemos ahí muy pronto.









